Redimir, (del latín redímere, delprefijo re-, de nuevo, y émere, comprar) “comprar de nuevo”. A pesar de que ese término se usa principalmente en ámbitos religiosos, no es mi intención hacer ninguna referencia mística o moral. Liberarse del dolor y continuar es un objetivo recurrente en los pacientes que acuden a psicoterapia; y los mayores dolores no vienen del exterior, sino de nosotros mismos.
Ya he hablado del sentimiento de culpa y sus implicaciones, pero quizás te preguntes:
¿Qué debo hacer si me siento culpable?
- Reconocer el origen de dicho sentimiento y sus manifestaciones:
Asegúrate de estar entendiendo lo que ocurre en tu interior cuando te sientes culpable, hacia donde diriges esa culpabilidad, qué la origina y cómo reacciona tu cuerpo en consonancia. Quizás te sientas ansioso/a, te cueste conciliar el sueño, te notes abatido o triste… ¿Se trata realmente de ese mal día en el trabajo o es que en el fondo piensas que no mereces ostentar esa posición?
- Aceptar que hiciste algo mal (incongruente con tus valores):
Ahora que lo has identificado, debes ser capaz de entenderlo. Por los motivos que fueran no actuaste de acuerdo con lo que crees correcto y acorde con quién eres, sin embargo eso forma parte del pasado y no tiene por qué mantenerse o repetirse.
- Enmendar los errores:
No se puede cambiar el pasado, pero puedes compensarlo. De hecho la culpa es una forma de comunicarnos que debemos actuar de forma distinta, eso puede empezar ahora mismo: tomando responsabilidades por lo sucedido. A veces resultará tan simple como pedir perdón, confesar la verdad o renunciar a la causa de esa incongruencia; otras, puede ser más profundo y complejo de enmendar.
- Aprender de la experiencia
Pregúntate qué has sacado de esa experiencia. ¿Te ha enseñado algo de ti mismo, de los demás o del mundo que te rodea? Si ante otra situación similar, ahora respondes de forma distinta significará que ha habido un aprendizaje.
- Perdonarte y seguir adelante
Todo el mundo comete errores, solamente entenderlo y ser benevolentes con nosotros mismos nos permitirá salir del pozo del remordimiento y avanzar.